Los dominicanos celebran el Día de la Altagracia, homenajeando a la “Patrona del pueblo” con una jornada de fe y devoción en la Basílica de Higüey.
Desde tempranas hora de la madrugada, miles de fieles llegan al templo desde distintas regiones del país, cumpliendo promesas hechas a cambio de milagros de salud, trabajo, vivienda o viajes.
Muchos peregrinos, que hasta amacen en las afueras del templo, acuden de rodillas, a caballo, en vehículos repletos o caminando largas distancias para venerar a “Tatica”, como cariñosamente llaman a Nuestra Señora de la Altagracia. Ya en el histórico templo, hacen extensas filas pra tocar auque sea por un segundo a la estatua de la virgen.