Escrito por: SILVIO CABRERA (s.cabrera@elnacional.com.do)
La cancelación del teniente coronel Johan Emilio Liriano Sánchez, quien fue apresado ayer para ser investigado por el triple asesinato ocurrido el miércoles en una finca de la comunidad Yaguate, San Cristóbal, había sido recomendada al Poder Ejecutivo el 11 de este mes junto a nueve oficiales más y dos alistados, por alegadamente estar implicados en distintos hechos contrarios a los lineamientos de la Policía.
Era, además, considerado una persona de la estrecha confianza del expresidente de de la DNCD, mayor general Rolando Rosado Mateo, hasta el punto que en una ocasión afirmó que era un especialista reputado en el mantenimiento y reparación de helicópteros, y que tanto él como el propio presidente Leonel Fernández no abordaban esas aeronaves si antes no eran revisadas y probadas por Liriano, quien ofrece sus servicios a varios propietarios de helicópteros.
La cancelación de su nombramiento y de otros oficiales y alistados fue recomendada al presidente Danilo Medina durante la reunión que sostuvo el 11 de este mes el Consejo Superior Policial.
Una nota informativa emitida en esa ocasión indica que “El Consejo Superior Policial recomendó al Poder Ejecutivo el retiro forzoso y cancelación de nombramiento de diez oficiales y dos alistados, implicados en distintos hechos contrarios a los lineamientos del cuerpo del orden”.
La Policía explicó en esa ocasión que los oficiales a los que se recomendó la cancelación de nombramiento son el teniente coronel Johan Emilio Liriano Sánchez, el mayor Elvis Jovine Tapia, capitán Danilo Sánchez Minier, primer teniente Braulio Valdez Viola y segundo teniente Apolinar Brito Valenzuela.
Trascendió que, sin embargo, Liriano Sánchez continúa activo, en razón de que todavía el presidente Medina no ha emitido el decreto de cancelación de los citados oficiales.
En el 2011, Liriano Sánchez fue relevado de su puesto de encargado de la Dirección Nacional de Control de Drogas en el Aeropuerto Internacional de las Américas luego que amenazara a los periodistas que cubren esa fuente con involucrarlos en un alijo de estupefacientes sí continuaban mencionando en los medios de comunicación los nombres de los agentes involucrados en los últimos casos de narcotráfico.
Esa vez, el entonces presidente de la Dirección Nacional de Control de Drogas, mayor general Rolando Rosado Mateo, salió en su defensa y lo calificó como un policía honorable, de su estrecha confianza, sacrificado por la DNCD y por el país, sirviendo sin horario y con total entrega.
La reacción de Rosado Mateo se produjo en respuesta a un reportaje publicado por acento.com, que daba cuenta de que el oficial había recibido de la DNCD un millón 567 mil pesos, en dos cheques.
Al respecto, Rosado Mateo explicó que esos recursos fueron entregados a Liriano porque es el encargado de administrar la “cantina” y la “mesa” de la DNCD, es decir la compra y servicio de alimentos para los agentes de esa entidad.
Su historial policial indica que en diciembre del 2010 cuando se desempeñaba con el rango mayor estuvo involucrado en un incidente trágico en el que fueron muertos por agentes policiales dos jóvenes residentes en el barrio Capotillo, que se hallaban en sus viviendas.
